Llega el verano .... y los robos. Dispositivos de seguridad en las persianas

Las ventanas son, en casi un 30% de las ocasiones, el lugar por el que los ladrones entran a robar en una casa. Las persianas pueden suponer una pequeña barrera, pero hay veces que ni eso es suficiente para disuadirles. Por eso cada vez hay más gente que coloca dispositivos de seguridad en las persianas, sobre todo en las afueras de las grandes ciudades, en los chalets o en las casas de campo. El kit D.V.A. es uno de los sistemas de seguridad más demandados, ya que es muy sencillo de instalar. Con este dispositivo se puede bloquear completamente cualquier persiana cerrada. Está compuesto por 2 piezas D.V.A., 2 cintas de fijación y tornillos de fijación al eje. Antes de instalarlo hay que tener en cuenta que este dispositivo aumenta en 10 mm el diámetro de enrollamiento de la persiana. Para su instalación habrá que fijar los tirantes D.V.A. sobre el eje de enrollamiento, con los dos tornillos, y a la última lama de la persiana, bien en el gancho de la misma o con tornillos, usando en este caso una chapa de fijación. Una vez colocado el dispositivo deberá comprobarse que cuando el operador llega al final el D.V.A. quede completamente rígido; que la cinta quede perpendicular a la vertical de la persiana; y que el operador se para por fin de carrera o por bloqueo de la persiana.

Consejos: Las cintas para las persianas, ¿Como cambiarlas?

El paso del tiempo hace que las cintas de las persianas se vayan desgastando, de subir y bajar la persiana. Cambiarlas es muy sencillo, puedes hacerlo tú mismo o llamar a un experto si no te ves capaz.
Lo primero que tienes que elegir es el tipo de cinta que quieres poner. En persianas capicúa podrás elegir entre una cinta de nylon, que la puedes encontrar en tres colores, blanco, beige y gris, o una de algodón. Ambas son muy resistentes y duraderas.
Para cambiar una cinta de una persiana simplemente debes disponer de un destornillador y unos alicates. Lo primero que hay que hacer es bajar la persiana, y desatornillar el cajón de la persiana. Después quitarás la cinta vieja del disco donde se recoge la persiana y posteriormente del recogedor que va a la pared.
Una vez hecho esto procederás a instalar la nueva cinta. Primero debes enrollarla al recogedor y fijarla con un tornillo para que no se suelte. Sacamos el resto de la cinta por el orificio del recogedor y volvemos a atornillar el recogedor a la pared. Como precaución para evitar que se te quede demasiada cinta dentro, puedes sujetarla con una pinza por fuera. Ahora deberás colocar la cinta en el disco por el orificio y hacer un nudo doble para que no se suelte.
Antes de volver a atornillar el cajón de la persiana debes comprobar que ésta baja correctamente y que no te sobra ni te falta cinta. Sí es así, puedes colocar el cajón y listo. ¡Ya tienes tu nueva cintaen la persiana!

Persianas para tu casa del pueblo o la del campo

Si tienes una casa en el campo o en un pueblo, y quieres darle un toque más rústico a tu hogar, puedes decantarte por las persianas de cadenilla o alicantinas. Son las de toda la vida, las más económicas y, además, nunca pasarán de moda.

Hay dos tipos de persianas de cadenilla las de madera natural o barnizada, y las de P.V.C. . Las primeras puedes elegirlas en varios colores: barniz, verde natural, blanca y marrón. Mientras que las segundas se fabrican en marfil, verde e imitación a la madera. No hay una gran diferencia de precio, pero las persianas alicantinas de P.V.C. son algo más económicas que las de madera.

Este tipo de persianas se fabrica desde los 4o centímetros de ancho hasta 1,75 metros

¿Como elegir el tipo de persiana?

La elección del tipo de persianas que se van a poner es muy importante. Depende de la parte del hogar en la que vayamos a colocar las persianas, de si es un lugar de trabajo o una casa de campo, se usarán un tipo u otro.Las persianas enrollables son las que más demanda tienen en nuestro país. Una de las características por las que los clientes suelen elegirlas es porque son capaces de impedir la entrada casi total de la luz del exterior, así como ayudar a insonorizar la estancia.Similares a estas últimas son las persianas plegables, que pueden ser horizontales o verticales. La ventaja de este tipo es que no necesitan tambor donde enrollar las lamas, y son igual de eficaces que las anteriores a la hora de impedir la entrada de luz en el hogar.Otro tipo de persianas que tienen cada vez más adeptos son las venecianas. Suelen elegirse atendiendo a un uso más decorativo, por eso los clientes suelen pedirlas en diferentes colores para que vayan acorde con la pintura de las paredes o con los muebles que haya en la estancia. Se usan mucho en habitaciones infantiles, en terrazas, en oficinas, o incluso para separar dos estancias de la casa que no tienen puertas. Además, el cliente podrá elegir el material del que quiere que estén hechas las láminas de las persianas, entre madera, aluminio y PVC.Las de láminas no son muy comunes, pero los que las eligen lo hacen por motivos, normalmente, decorativos, por su similitud con las cortinas. Los materiales más solicitados para este tipo de persianas son el PVC y la tela.

Aíslate: Persianas de aluminio de extrusión

Las persianas de aluminio de extrusión suelen elegirse cuando, además de un aislamiento térmico y acústico, se quiere aportar una mayor seguridad a las ventanas en las que se van a instalar. El aluminio extrusionado es muy resistente, lo que hace que la persiana no se deforme con el frío ni con el calor. Pese a ello, este tipo de persianas se puede subir y bajar fácilmente, y eso es un detalle que suele buscarse, ya que si pesara demasiado algunos miembros de la casa no podrían levantarlas.Este tipo de persianas se fabrican en varios colores. El blanco es sin duda el que tiene más adeptos, ya que es el más barato. Pero también hay quien las prefieren en su color natural, en oro, en bronce, o incluso en un tono imitación a la madera, cuyo precio es bastante elevado.

A la hora de elegir las persianas de aluminio de extrusión habrá que tener en cuenta si se quiere un perfil curvo, el más común, o uno recto. El perfil curvo va desde los 50 mm hasta los 95 mm, aumentando su peso según la curvatura de la persiana. Sin embargo, el recto sólo puede elegirse entre el de 45 mm o el de 100 mm.